El jueves 30 de abril, el Señor Arzobispo Primado presidió las fiestas patronales en Villa Albertina (Lomas de Zamora). La fiesta de ésta Virgen Mártir de los primeros siglos del cristianismo, comenzó con la administración del santo Bautismo (celebrado en rito tridentino, como es de uso en la ICAA) por el padre Canciller. Luego de ser recibido, Mons. Luis Bergonzi celebró la Santa Misa y posteriormente se inició la solemne procesión por las calles de Villa Albertina. En el sermón el Prelado habló del compromiso que deviene de ser testigos (eso significa ser mártir) como Santa Catalina de Alejandría que ofrendó su propia vida por sus ideales. La tibieza espantosa con que nos tomamos nuestra bendita Religión Católica es la causante de los estragos que vive la sociedad. No hay que tener miedo de oponer la fuerza arrolladora del amor que nos trajo Jesús, a todos los desparpajos que se nos ofrecen a cada instante a cambio de pisar los valores del Evangelio. “miremos el ejemplo de Catalina, joven, pura, pero que antepuso su valor, su fe a todo lo demás” culminó el Arzobispo.-
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